Marqués me han revelado
en nocturna confesión
la mortal conjuración
pa’ verlo despatarrado.
Marqués le pido licencia
pa’ decir sin floritura
que me ha soplado otro cura
contra usted mortal sentencia.
Comprenderá Su Excelencia
yo solo soy un mandado
esto que hube escuchado
y bien cerrada la puerta
para que a usted se lo advierta
Marqués me han revelado.
Yo no sé si usted sospecha
que hay más de un forajido
si bien usted es querido
hay gente que no es derecha.
Por eso como una flecha
vine hasta su salón
y pa’ más información
sabemos quién tiró el dardo
de entre tanto gato pardo
en nocturna confesión.
Las personas de esa laya
argumentan sus razones
que usted con sus ambiciones
¡se ha pasado de la raya!
Y dicen: Mejor que vaya
pidiendo la extremaunción
y ya por su salvación
oran en el Beaterio
no sonría que va en serio
la mortal conjuración.
Y puesto que es mi deber
el invitarlo a la misa
¡vamos Marqués dése prisa
pues no hay tiempo que perder!
Que si lo van a coger
¡que lo cojan confesado!
con ánimo renovado
todos compraron su cota
y apoquinaron la cuota
pa’ verlo despatarrado.
© 2005 Luis Bárcena Giménez
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